Creo que estuve um buen tiempo sin colocar una nueva materia en este blog. Podría presentar una montaña de disculpas y explicaciones. La mejor de ellas y aparentemente, la que mejor justificaría todo, sería la falta de tiempo, pero no es verdad.
Recuerdo que un día, cuando era niño, mi padre me dio una tarea que no cumplí, y el argumento que presenté para defenderme fue:
-Disculpa, el tiempo no me alcanzó.
Mi padre me miró a los ojos, y con su voz dura y firme, sentenció:
-Hijo, en la vida, el tiempo solo te alcanza para lo que consideras prioritario.
Los años se fueron. Mi padre ya no vive, pero yo nunca olvidé aquellas palabras. Él era un hombre sabio y su consejo me sirvió en muchas circunstancias de la vida. Así que no presentaré disculpas esta vez, ni trataré de explicar el hecho de que estuve varias semanas sin colocar una nueva materia en este blog. A final de cuentas tú, como lector, eres muy valioso y mereces todo el respeto y la consideración del mundo. Todo mi ministerio gira en vuelta de las personas que me acompañan con cariño. ¿Por qué habría algo más importante que tú?
Pero la vida es así. Vivimos corriendo como locos, no tenemos tiempo para nada, ni siquiera para lo que pensamos que amamos mucho, como la esposa y los hijos, mucho menos para Dios, a quién decimos servir. Hoy estuve pensando en eso.
El sol se filtra por entre las ramas de los árboles y acaricia mi ventana. Es bastante temprano, pero ya estoy aquí dispuesto a abrirte mi corazón y decirte que en esta vida todos necesitamos crecer, aprender y muchas veces pedir perdón y corregir, no lo que hicimos, sino lo que dejamos de hacer.
¿Qué estás descuidando en tu vida? ¿Qué es lo que consideras prioritario? ¿Hay a tú lado personas a quienes hace muchos días no les das un poco de tiempo? ¿A dónde va tu amor? Mira a tu vuelta, de repente encuentras corazones tristes, secos, como tierra sin lluvia, esperando una mirada de amor, una simple palabra, un gesto de cariño.
No dejes para mañana lo que puedes hacer hoy. Si tienes que renunciar a un lindo “paseo de barco”, por el río, hazlo en favor de las personas que dices amar. A final de cuentas el amor es eso: renuncia, entrega, lágrimas, a veces sin ser comprendido. Pero vale la pena hacerlo. Te lo aseguro. Un abrazo.
Querido Pastor Bullon, es una grato privilegio saber que ahora se a unido a pocos de los Adventistas que hacemos predicacion por internet le comento que tengo un blog llamado Full Adventistas, si le parece bien visitelo y si le gusta intercambiemos banners.
ResponderExcluirhttp://fulladven.blogspot.com
Hola Pastor, ahora entiendo porque en su entrevista dice algo asi como que usted administra su tiempo o que tiene tiempo para todo lo que quiere, porque se necesita amar mucho la obra del Senor para dejar un paseo asi, tmb su amor por escribir debe ser muy grande. Se lo que es renunciar a algo o alguien que amas mucho, sobre todo si es por amor a Dios y, claro que vale la pena hacerlo. Le deseo lo mejor para que continue su ministerio, se que el Senor esta detras de todo lo que usted hace. Bendiciones!!
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